FAQs
Preguntas frecuentes
En un primer momento todo son dudas, nos asaltan temores a la hora de enfrentarnos a lo desconocido y sentimos no entender nada. Una vez nos dijeron que somos el “zoom de la letra pequeña de los bancos”, nosotras hablamos claro y sin tecnicismos para que esas dudas iniciales se disipen. Somos francas, si no es tu momento también te lo haremos saber.
Lógicamente, podrás pagar tu vivienda al contado si dispones del dinero. Recuerda que deberás sumar entre un 10% y 15% de gastos adicionales al precio de tu vivienda en concepto de notaría, impuestos, registro de la propiedad,…
Si no cuentas con todo el dinero, puedes pedir una hipoteca. Por norma general el banco ofrece un máximo del 80% del valor de tasación de la vivienda, es decir, deberás tener entre un 25% y un 35% del valor de la vivienda, además de los gastos adicionales que mencionábamos en el punto anterior.
La subida de tipos de interés hace que suba el Euribor, y por tanto cada vez más personas quieren cambiar su hipoteca variable a una de tipo fijo.
Estas cosas no se hacen ni con el corazón ni con el estómago, se hacen con la cabeza. Vamos a daros las claves que tenéis que tener en cuenta antes de cambiar vuestra hipoteca de variable a tipo fijo.
- Escoger novación o subrogación (si no sabes qué es esto, contacta con nosotros antes de hacer nada).
- Compara hipotecas (nosotros lo haremos por ti).
- Si hace poco pediste una hipoteca variable, eres de las que más te interesa.
- Revisa las comisiones asociadas (o ponte en manos expertas y despreocúpate).
La edad por sí sola no te impedirá conseguir una hipoteca para tu nueva casa, pero tendrás que demostrar que aún puedes cumplir los requisitos de financiación, especialmente si estás jubilado.
Es ilegal que un prestamista hipotecario rechace tu solicitud por tu edad. Lo importante es demostrar tu capacidad para devolver el préstamo.
Por tanto, SÍ puedes pedir una hipoteca a partir de los 60 años, pero debes acreditarlo de alguna manera:
- Prueba de ingresos
- Detalle de deudas actuales
- Relación entre ingresos y deudas
- Calificación crediticia
Si tienes 60 años o más y quieres solicitar una hipoteca, solicítanos información sin compromiso, estaremos encantadas de estudiar tu caso.
De manera general, tendrás que presentar:
- Declaración del IRPF.
- Recibos de otros préstamos.
- Extractos bancarios.
- Contrato de arras (si tienes uno firmado con el vendedor).
- Vida laboral.
- Justificante de otros ingresos.
- Nota simple de la vivienda a hipotecar, y también de otras propiedades a tu nombre.
Pero esto no termina aquí:
- Si eres asalariado/a también tendrás que presentar tu contrato laboral en vigor y nóminas de los últimos meses.
- Si eres autónomo/a, deberás presentar las declaraciones trimestrales y los últimos recibos de la S.S.
Las entidades financieras son conscientes de la urgencia de financiación que tienen las personas. A pesar de que este proceso se ha optimizado con el paso del tiempo, la aprobación y desembolso de un crédito hipotecario puede tardar entre 45 días y 60 días. Este tiempo puede variar, y dependerá del tiempo que requiera el proceso de legalización del crédito y la firma de escrituras, entre otros. Para conocer con detalle todas las recomendaciones antes de solicitar una hipoteca, te recomendamos contactar con nosotros y aclarar cualquier tipo de duda antes de comenzar el proceso.
El importe mínimo que se puede solicitar es de 60.000 euros. Por lo tanto, teniendo en cuenta los porcentajes máximos que financiamos, 80% para residencia habitual y 60% para segunda residencia, el valor mínimo de una vivienda de uso habitual sería de 75.000 euros y de una segunda residencia sería de 100.000 euros.
A pesar de no existir una cantidad mínima establecida por ley para una hipoteca, pues esto representaría una pérdida para las entidades financieras, algunos bancos han establecido un importe mínimo entre 30.000 euros y 80.000 euros. A fin de cuentas, estas hipotecas generan menos intereses que otras de mayor importe con la misma duración, y los bancos también son negocios.
Una intermediaria hipotecaria es una persona que se encarga de buscar las mejores hipotecas y negociar condiciones.
Las ventajas de contar con una intermediaria hipotecaria son muchas, pero aquí os mencionamos la principales que conseguiréis si os ponéis en contacto con nosotras:
- Conseguiremos más ofertas que si te ocupases personalmente de ello, además no te tendrás que ocupar de nada.
- Conseguiremos mejores condiciones en esas ofertas.
- Gestionaremos tus trámites y el proceso de contratación será más rápido.
- Resolveremos tus dudas.
- Podremos conseguir hipotecas de más del 80%.
¿Tienes más dudas?
Estamos aquí para ayudarte.